Siguiendo con los proyectos personales de enólogos reconocidos, probamos la primera añada de Cuestión de Tiempo, el blend de Rafa Domingo, enólogo (y uno de los dueños) de Domingo Molina, bodega situada en Yacochuya, Cafayate.
Esta añada, 2020, está elaborada a partir de uvas cabernet sauvignon, tannat y malbec, todas ellas de viñedos ubicados en Tolombón, a 1900 msnm y a unos 15 km al sur de Cafayate. Si bien no hay un proporción exacta, nos cuenta Rafa que aproximadamente el 80% del blend es malbec y el 20% restante se reparte entre el CS y el TN. El corte MB-CS-TN es el corte típico del Valle Calchaquí y eso es lo que quiere representar Rafa, aprovechando la elegencia y frescura que aporta el MB, la potencia del TN y la piracina del CS.
Se cofermentaron las tres variedades en huevos de cemento con intervención mínima, esto es mojando el sombrero con baldes. Una vez listo el vino, quedó por 6 meses más en los huevos de cemento y luego pasó a barricas de roble de 225 litros y de primer uso, donde permaneció 10 meses más. La producción fue de solamente 1200 botellas.
Antes de pasar el vino, merece mención especial la etiqueta. Lo primero que uno nota es una huella digital (la de Rafa) enmarcada en un círculo de dos colores, dividido por una línea. Esa línea es la línea del tiempo y los colores representan el cielo y el color más ocre de la Quebrada. Un poco más abajo vemos una secuencia de 11 puntos, uno diferente al resto que representa la madurez, la necesidad de cambio, y la letra O de la palabra Cuestión está representada por el 12do punto, en rojo, que indica que ese cambio, esa madurez, llegó. En el borde superior derecho de la etiqueta leemos Veritas Vincit, que siginifica "la verdad vencerá". Finalmente, el nombre del vino hace referencia a una película inglesa, About Time, que cuenta la habilidad de un joven, heradad de su familia, de viajar en el tiempo.
Probamos el vino y nos encontramos con una naríz típica del NOA, como no podía ser de otra manera para el corte clásico de la región. Mucha fruta negra presente con notas especiadas más sutiles y el infaltable pimiento asado apareciendo en una segunda capa de aromas. En boca resulta bastante franco, de perfil frutal, de acidez media y taninos bien presentes y amalgmados con el vino. De final medio a prolongado, nos encontramos con vino elegante, potente, que representa todo lo que uno espera de la tradición vinícola del NOA.
Nos cuenta Rafa que está trabajando en la añada 2021 del vino, mismos viñedos y mismo estilo de elaboración, solo que aumenta la crianza en huevos respecto a la crianza en barricas, las cuales serán de 2do uso.