Seguínos en las redes...

Seguínos en Facebook! Seguínos en Twitter! Seguínos en Instagram!

viernes, 26 de abril de 2024

Degustamos varias de las etiquetas de Finca Los Dragones, proyecto de Andrés Biscaisaque

El 10 de abril pasado degustamos varias de las etiquetas que Andrés Biscaisaque, el Vasco, elabora para Finca Los Dragones, proyecto familiar que lleva junto a sus hermanos en el Valle de Calingasta, San Juan. 

El Vasco es andinista, profesión que lo llevó a Barreal, en pleno Valle de Calingasta, allá por 2010. Allí nacen también sus ganas de hacer vino, pero que concreta en 2014, en su casa de Burzaco y con uva comprada. En 2015 se muda a Barreal para comenzar su proyecto y en 2018 elabora la primera añada, usando instalaciones de Cara Sur, de Pancho Bugallo. En 2019 compra las 5 ha que forman Finca Los Dragones, a 1650 msnm, y en 2020 cosecha las primeras vides. En la actualidad, la producción es de 30.000 botellas al año, que se alcanza con uvas propias (malbec, garnacha, criolla chica, bonarda, torrontés y moscatel blanco) y compradas.

Se elaboran varias etiquetas que tienen en común que sus nombres se originan en las experiencias del Vasco como andinista en Barreal, una zona situada entre la Cordillera de Los Andes y la precordillera. Así, Maida y Los Dragones hacen referencia a cerros ascendidos por primera vez por el Vasco, mientras que Alfil recuerda las partidas de ajedrez jugadas en la carpa durante las noches de los ascensos. En la línea Los Dragones Vinos de Parcela se busca expresar lo mejor de parcelas elegidas plantadas con malbec, torrontés sanjuanino y garnacha. 

La vinificación comienza con la cosecha manual y fermentación en vasijas de concreto con levaduras indígenas. En los casos en que los vinos tienen crianza, la misma se da en piletas, en huevos de concreto y en barricas de roble francés de diferentes usos y tamaños. Ninguno de los vinos se filtra ni clarifica y se agrega el mínimo posible de sulfito. 

Empezamos con Maida Malbec 2022, un blend de terroirs, donde la fruta proviene de Paraje Hilario, Barreal y Sorocayense. Llama la atención una nariz herbal muy potente que recuerda al tomillo y al orégano, de acidez media y refrescante en boca, taninos bien integrados y final medio. 

Seguimos con Alfil Tinto 2021, un bonarda que fue cofermentado con 5% de torrontés, ambas uvas de Paraje Hilario. De nariz muy frutal, recuerda a la fruta roja (ciruela, guinda) con un aporte muy sutil del torrontés. En boca es franco, de acidez media, nuevamente la sensación fresca, taninos apenas perceptibles y final medio. 

De Los Dragones probamos el syrah 2021 que se presenta con una nariz muy frutal, con notas que recuerdan a fruta negra fresca, con un toque especiado elegante. En boca mantiene ese perfil fresco de los vinos anteriores, con taninos algo más presentes pero siempre bien integrados, y de final medio+. Seguimos con Los Dragones Naranjo 2022, un blend de torrontés sanjuanino y mendocino por partes iguales. El vino pasa un mes en contacto con sus pieles en en huevos de concreto y luego pasa a barricas de 500 litros de segundo y tercer uso.

Ya en la línea de parcelas seleccionadas, empezamos con Las Mareadas Malbec 2022 que tiene una crianza de 10 meses en barricas de roble de 500 litros y del cual se elaboran 600 botellas solamente. De nariz elegante, de perfil netamente frutal, que recuerda a la fruta roja, como la ciruela. En boca muestra una acidez media+ muy interesante, taninos presentes, bien marcados, y de final medio+. Probamos también la garnacha de la parcela El Pedrazal, añada 2022, una apuesta fuerte del Vasco, que está convencido que la cepa encontró su lugar en Barreal. Esta añada es la primera de esta cepa, cuyos viñedos fueron plantados en 2019. También tiene 10 meses de crianza en barricas de 500 litros, pero en este caso el 50% del vino reposó en huevos de hormigón. De nariz claramente frutal, mucha fruta roja fresca, de intensidad media, muestra una acidez baja, muy agradable, taninos apenas perceptibles, bien integrados y un final medio+.

Vinos muy interesantes está logrando el Vasco con solamente cuatro cosechas de fruta propia en Barreal, una zona que está dando que hablar por la cantidad de productores jóvenes que están elaborando vinos de calidad.  

viernes, 5 de abril de 2024

Probamos algunos de los vinos Nido del Tigre que elabora Bodega del Carmen

Probamos dos de las cuatro etiquetas de Nido del Tigre de Bodega del Carmen, Valle de Calingasta, San Juan. La bodega y los viñedos están a 1450 msnm y se elaboran solamente 40.000 botellas al año. La enología corre por cuenta de Federico Isgro y Patricio Bellone, uno de los dueños del proyecto, nos contó detalles de los vinos y de la vinificación. 

Degustamos el malbec 2022, que según las notas de cata de la bodega, es una selección de momentos de cosecha. Patricio nos cuenta que esa selección se refiere a que el viñedo cuenta con cinco cuarteles o potreros de malbec, y en base a lo deseado en términos de maduración y concentración de azúcares, se elige estratégicamente cada parte del viñedo para cosechar los cuarteles en un orden determinado. La cosecha total puede durar varios días y esto es posible porque los viñedos y la bodega están en el mismo sitio. Yendo a la vinificación, para la fermentación se usaron huevos de hormigón, tanques de acero inoxidable y bines (microfermentación). En nariz resalta un perfil herbal muy agradable. En una segunda nariz aparecen notas florales y, finalmente, notas a fruta roja. De buena acidez y taninos presentes en boca, resulta un final medio que deja sensación de frescura. 

El cabernet franc 2022 también declara en las notas de cata una cosecha a mano de dos tiempos. Nuevamente, Patricio nos cuenta que en la finca hay dos cuadros del CF en la parte más alta, sobre suelos más pedregosos, y como la exposición al sol de los cuadros es diferente, la cosecha se da en dos momentos distintos. En cuanto a la vinificación, la fermentación se dio en huevos de hormigón. En nariz muestra un perfil piracínico clásico que recuerda al morrón asado, con notas herbales y algo de fruta roja. Franco en boca, de buena acidez, taninos presentes y bien amalgamados en el vino, de final medio muy agradable. 

Los dos vinos están muy bien y tienen una relación precio a calidad competitiva. Nos quedan por probrar un torrontés centenario y el Ripasso dal Giardino, un vino que resulta de la re-fermentación de un malbec joven en presencia de las pieles que se obtienen del prensado de uvas torrontés con un 30% de deshidratación antes de ingresar a la mesa de molienda.